martes, 28 de abril de 2009

Delito artístico del siglo XX



De una artística y férrea belleza está copada la vida y la personalidad de Philippe Petit, funambulista. Excéntrico, soñador, vivaz, adjetivos hermosos para una persona. Qué maravilla estar seguro de lo que quieres hacer, lo que quieres ser y lo mejor y más importante, conseguirlo. Después de algunos retos superados en otros países, Philippe se obsesionó con las torres gemelas de New York mucho antes de empezar a ser construídas. Viajó, las espió, las estudió para alcanzar su encumbrado objetivo. Rodeado de dificultades, de pesado material, de cómplices, de guardias, de incertidumbres muchas, finalmente el 7 de agosto de 1974 a las 7.15 am caminó por el cielo durante 45 minutos provocando deliciosas, insólitas y espirituales imágenes. Sonriendo en la cumbre del mundo, hizo florecer su sueño y la poesía mientras le observaban los ojos de todo el planeta.
Gracias Philippe.

http://www.youtube.com/watch?v=EIawNRm9NWM&feature=related