viernes, 30 de mayo de 2014

Migratorio #20

La verdad sólo radica en unas pocas personas. Lo demás son apariencias, filtros y capas mugrientas sin pureza. La cuestión es encontrarlas.

Migratorio #19

La ansiedad de abrir la boca encuentra siempre un motivo para romper la celda de las palabras.
La falta de aire.
¿cuánto pesa el silencio?

Olas adriáticas

Querida I,

Te deseo fuerza  y espíritu para sostener tu semana en la ciudad acuosa. Al menos escapas por un tiempo de esta asamblea de esquizofrenias. Y si todo se tuerce, disfruta del hundimiento de la ciudad mientras huyes en una góndola dejando que las corrientes te depositen en otras tierras. Allí encontrarás la cabaña. 


Fotografía: Julio González

miércoles, 7 de mayo de 2014

Migratorio #18

Corredor que huyes certero del gran miedo, inoperante salida. Todas tus marcas se reunirán en el cajón de los tiempos muertos.

martes, 6 de mayo de 2014

El joven Neil

Estaba plantado delante de la puerta de aquel vagón observando pasar las estaciones. Era alto, corpulento, llevaba un sombrero curtido por el tiempo que dejaba caer su pelo largo como dos cataratas hasta sus hombros. Vestía camisa de cuadros, chaqueta de cuero y pantalones vaqueros que tapaban parcialmente sus botas trabajadas. Aferraba una carpeta bajo su brazo derecho. Los papeles que sobresalían contenían diversos pentagramas musicales. Neil Young se bajó en la estación Esperanza.

Fotografía: Julio González



Urgencias

Se abrió el ascensor y allí estaba una señora, enjuta, posicionada como un botijo en una esquina. Superaba los sesenta años. Entré y pulsé mi piso de destino. ¿qué hace?, me vociferó de mala gana. No le contesté. Así va hacia abajo, gritó de nuevo. El ascensor empezó a subir. Seguí callado afilando el silencio. Primero la educación, después viene todo lo demás, le susurré sin desviar la mirada de la puerta. Sí, primero la educación, me replicó con cierto desdeño. Llegó a su piso y mientras se abrían las puertas me dijo irónicamente: Es usted muy educado.  

Usted no, repliqué.

Fotografía: Julio González